Una actividad controvertida
A diferencia de muchas especies marinas (salmón, lubina, dorada), la acuicultura de grandes atunes no está perfectamente dominada y sigue siendo objeto de una amplia experimentación en varios países (Australia, Japón, Europa) para realizar el ciclo completo de cría durante varias generaciones, con el fin de eliminar las capturas en el mar y maximizar los beneficios. Los defensores de la acuicultura de grandes atunes creen que la cría reducirá la presión sobre las poblaciones silvestres. Las organizaciones ecologistas creen que el problema no hará más que desplazarse, ya que la presión pesquera se trasladará a los «peces forrajeros» que se encuentran en la base de la cadena alimentaria, con lo que se corre el riesgo de perturbar todo el ecosistema marino.
Engorde de atún
La cría de atún rojo se basa casi exclusivamente en el «engorde», una técnica que consiste en capturar atunes jóvenes en la naturaleza y cultivarlos en grandes piscifactorías hasta alcanzar el tamaño comercial. Alimentados con pescado «de pienso» (10 kg de sardinas o caballa producen 1 kg de atún), los peces engordan rápidamente antes de ser sacrificados y exportados a países consumidores, principalmente Japón, lejos de donde se producen, contribuyendo a la emisión de gases de efecto invernadero.
La actividad es controvertida; para los defensores de la pesca sostenible, diezma a los futuros reproductores y carece de transparencia.
Tal y como se practica hoy en día, la acuicultura del atún rojo parece estar lejos de ser sostenible, ya que plantea, entre otras cuestiones, el problema de la gestión de los recursos marinos, los impactos ecológicos y las emisiones de gases de efecto invernadero.
El rincón de los expertos
En los centros de engorde se engordan tres especies de gran valor comercial: el atún rojo del Atlántico(Thunnus thynnus), el atún rojo del Pacífico(Thunnus orientalis) y el atún rojo del sur(Thunnus maccoyii). Más de 50 granjas, situadas en Australia, México, Japón y el Mediterráneo, produjeron un total de 36.350 toneladas en 2014, incluidas 14.500 toneladas de atún rojo del Atlántico, principalmente en Italia, España, Croacia, Malta y Turquía.
La gran mayoría del atún rojo capturado en el Mediterráneo por la pesca industrial se destina a la actividad de engorde que sirve al mercado japonés.
Prudencia y discernimiento
Hace unos años, con las poblaciones al borde del colapso, se desaconsejó ampliamente el consumo de atún rojo, lo que llevó al Principado de Mónaco a adoptar una moratoria consensuada sobre su consumo. Ahora que las poblaciones están en mejor estado, es posible consumir atún rojo, pero con mucho cuidado. Ethic Ocean sugiere limitar la cantidad consumida, favorecer el origen «Atlántico oriental y Mediterráneo» y elegir los ejemplares pescados con caña que pesen más de 30 kg (es decir, en su madurez sexual). Por otra parte, debe evitarse el consumo de atún rojo de la población del «Atlántico occidental» y de otras especies de atún sobreexplotadas, el atún rojo del Pacífico (Thunnus orientalis) y el atún rojo del sur (Thunnus maccoyii) de la parte meridional de los tres océanos.
¿Qué criterios deben aplicarse?
Para el Sr. GoodfishSegún el programa de consumo sostenible de la Fundación Príncipe Alberto II, el atún rojo puede consumirse, pero sólo si es salvaje, procede de determinadas zonas de pesca (principalmente el Atlántico) y se captura fuera de su periodo de cría con una talla mínima recomendada de 120 cm.
Las etiquetas
Algunas etiquetas ofrecen atún rojo capturado de forma responsable de acuerdo con la normativa vigente y las especificaciones propias del método de pesca (palangre, caña y línea). Se refiere al atún rojo capturado con sedal e incluye las medidas correctas que hay que tomar cuando se capturan especies «accesorias» (tiburones, rayas pelágicas, tortugas marinas, aves).
Nuestro mejor consejo: cuando compre atún u otros productos del mar, sea curioso y exigente. No dude en hacer preguntas al vendedor o al dueño del restaurante, ¡están ahí para eso! Intente identificar las especies que consume, dónde se han capturado o producido, el método utilizado y cómo se cultivan o pescan de forma sostenible. No compre nunca atún rojo procedente de la pesca recreativa o deportiva, ¡está prohibido!
12 AGOSTO 2020 : Noticias sobre la certificación del atún rojo del Atlántico...
El Marine Stewardship Council acaba de conceder la «etiqueta de pesca sostenible » a una pesquería que utiliza palangres (grandes líneas con anzuelos) en el océano Atlántico oriental (55 toneladas capturadas en 2018). Esta decisión se produce después de que un experto jurídico independiente determinara que las medidas de la empresa cumplían plenamente los criterios de la pesca sostenible. Se informa de que otras pesquerías están en proceso de solicitar la certificación.
Como medida de precaución, dada la incertidumbre científica sobre el estado de la población, algunas ONG se oponen actualmente a cualquier certificación del atún rojo del Atlántico. Para WWF, » la certificación MSC del atún rojo es una señal alarmante de que el resultado está impulsado por la demanda de la industria y no por las pruebas científicas de sostenibilidad… Esta puede ser una tendencia peligrosa que puede amenazar la plena recuperación del atún rojo y nuestra capacidad para restaurar la salud de los océanos del mundo para 2030 »
En la Lista Roja Europea de Peces Marinos de 2015 de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), el atún rojo del Atlántico figura como Casi Amenazado.
La sobrepesca y el exceso de capacidad de las flotas pesqueras son la principal causa del agotamiento del atún rojo.
¿Lo sabías?
El azote del plástico en el mar también amenaza al atún rojo. Según un estudio de 2015 sobre los grandes depredadores del Mediterráneo (atún y pez espada), el 32,4% de los ejemplares de atún rojo encuestados contenían plástico en sus estómagos, lo que supone una verdadera preocupación para la UICN y una señal de alerta sobre los posibles efectos de estos residuos en la salud humana.
En 2006, para evitar el colapso total de las poblaciones, se elaboró un plan de recuperación para elAtlántico oriental y el Mediterráneo se adoptaron medidas de seguimiento y control de las actividades pesqueras (temporadas de veda, obligación de una «talla mínima de conservación» de 115 cm o 30 kg (algunos tipos de pesca tienen excepciones de 8 kg o 75 cm), prohibición de aviones de reconocimiento, presencia de observadores a bordo de los buques, trazabilidad de las capturas, etc.), pero las cuotas de pesca siguen siendo demasiado elevadas
Una pequeña victoria en la CITES
Bajo la presión de las ONG y de algunos Estados (entre ellos el Principado de Mónaco y Francia) que abogan por la inclusión de la especie en el Anexo 1 de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) -lo que tendría como efecto la prohibición del comercio internacional-, se revisa a la baja la cuota (13.500 toneladas) para 2010, siguiendo por primera vez los dictámenes científicos; ¡una importante victoria para las organizaciones que trabajan por la pesca sostenible del atún rojo!
Una situación que mejora desde 2019
Gracias al refuerzo del plan de recuperación y a un control más eficaz, la situación del atún rojo está mejorando a partir de 2009. Las capturas declaradas están disminuyendo, el seguimiento aéreo muestra que los atunes rojos jóvenes son más abundantes, la biomasa de desove está aumentando y los pescadores los observan con mayor regularidad. Hoy en día, la especie ya no está «sobreexplotada», pero la población actual, aunque en mejor estado, está lejos de haber recuperado su nivel preindustrial, y persisten malas prácticas como la pesca ilegal.
Con el aumento de las cuotas de pesca (32.240 toneladas para 2019, 36.000 toneladas para 2020 -incluidas 19.460 toneladas para la Unión Europea y 6.026 toneladas para Francia-), los niveles más altos desde que se puso en marcha el plan de recuperación, corresponderá a la comunidad internacional, a los científicos y a los consumidores vigilar cuidadosamente la situación del atún rojo del Atlántico en los próximos años. ¡Para continuar, entonces!
El rincón de los expertos
El papel de la CICAA
En el Océano Atlántico y mares adyacentes (incluido el Mediterráneo), la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (CICAA) que se encarga de la conservación y la explotación sostenible de todas las especies de atún y otras especies comerciales pelágicas que viven en la zona (pez espada, marlín, tiburones). Basado en pruebas científicas, este organización regional de ordenación pesquera (OROP) diagnostica el estado de las poblaciones, elabora recomendaciones para que los países firmantes puedan negociar acuerdos vinculantes, definir las cuotas de pesca (los famosos «TAC», por «Total Allowable Catch») y adoptar medidas para limitar las capturas accesorias. Para el atún rojo del Atlántico, la CICAA considera dos entidades de gestión distintas, el «Atlántico oriental y el Mediterráneo » (que representa más del 90% del total de las capturas y la población de atún rojo del Atlántico) y el «Atlántico occidental «.
Otros atunes gestionados por la CICAA
En la zona gestionada por la CICAA, los atunes que conviven con el atún rojo del Atlántico son el patudo(Thunnus obesus) (patudo), el rabil(T. albacares) (rabil), el atún blanco(Thunnus alalunga) (atún blanco) y el listado(Katsuwonus pelamis) (listado).
El atún rojo es una de las especies pesqueras de mayor valor comercial. La gestión de las pesquerías de atún rojo ha sido durante mucho tiempo un símbolo de la dificultad de la comunidad internacional para gestionar de forma sostenible este recurso raro y frágil.
Los profesionales del sector y los grupos de conservación intentan organizarse para preservar las poblaciones.
Rechazar una desaparición programada
La Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (CICAA), creada en 1969, logró establecer las primeras cuotas de pesca en 1998. A pesar de ello, en la década de 2000, el aumento de la sobrepesca hizo temer la desaparición de la especie. Entonces se puso en marcha una fuerte movilización internacional, apoyada por el Príncipe Alberto II de Mónaco y su Fundación.
La Fundación Príncipe Alberto II, en colaboración con el WWF, es una de las primeras organizaciones que ha puesto de manifiesto el alarmante estado de las poblaciones de atún rojo en el Mediterráneo en la escena internacional.
Con la asociación MC2D, convenció a los restauradores y comerciantes del Principado para que dejaran de vender este pescado, en vías de extinción.
Junto con el Instituto Oceanográfico, contribuye a informar y movilizar al público en general.
Poderosos grupos de presión
En 2010, en la Conferencia de Doha, el Gobierno monegasco solicitó oficialmente la inclusión del atún rojo en el Apéndice I de la CITES. Esta propuesta pretende prohibir el comercio internacional de la especie y consolidar la pesca tradicional sostenible existente. Sin embargo, la CITES finalmente votó en contra de esta propuesta, bajo la presión de Japón.
Al representar el 80% del consumo mundial de atún rojo, Japón es un poderoso grupo de presión. No obstante, los debates y la cobertura mediática internacional de esta votación han sensibilizado a todos los actores del sector.
Han promovido el establecimiento de una gestión eficaz de las pesquerías de atún rojo. La CICAA está reduciendo las cuotas de pesca de 28.500 a 12.900 toneladas al año, de acuerdo con las recomendaciones de científicos y conservacionistas. Además, las cuotas son objeto de un mayor control por parte de los países afectados.
¿Esperanza para las poblaciones de atún rojo?
Gracias a este aumento y a varios años favorables, las primeras esperanzas de estabilización y recuperación de la población de atún rojo del Mediterráneo aparecen a partir de 2012. En su reunión de noviembre de 2012, la CICAA decidió seguir las recomendaciones científicas y mantener las cuotas en su nivel, con el fin de confirmar y consolidar estos primeros signos alentadores.
De hecho, estos índices de recuperación deben tratarse con cautela porque, como señala el informe de la CICAA de 2012, «aunque la situación ha mejorado […], sigue habiendo incertidumbres en torno a la magnitud y la velocidad del aumento de la biomasa de la población reproductora».
La precaución está a la orden del día
Estas incertidumbres están relacionadas, por un lado, con la subestimación de la pesca ilegal, ya que la CICAA reconoce que las capturas de atún rojo han sido «gravemente infradeclaradas» durante al menos los últimos 15 años; por otro lado, el desconocimiento de las pautas de migración del atún rojo no permite una buena evaluación de las poblaciones.
Por lo tanto, mejorar la trazabilidad de las capturas de atún rojo en los próximos años sigue siendo un reto importante. Desde 2008, WWF, con el apoyo de la Fundación Príncipe Alberto II de Mónaco, trabaja para avanzar en el conocimiento de la pesca ilegal y la evaluación de las poblaciones.
Por ejemplo, WWF animó a la CICAA a introducir un documento electrónico de captura de atún rojo en 2013 para facilitar la trazabilidad de las capturas.
¿Cómo podemos proteger a los tiburones, que son tratados como capturas accidentales?
Sin embargo, el alcance del trabajo de la CICAA sigue siendo limitado. Algunas medidas de protección también abarcan al pez espada, pero los tiburones siguen siendo tratados exclusivamente como capturas accesorias en la pesca del atún. Varias especies de tiburones están amenazadas por la pesca, sobre todo en el Mediterráneo. Esta situación fue reconocida en la primavera de 2013 por la CITES. La inclusión de cinco nuevas especies de tiburones en el Apéndice II de la CITES hace que el comercio internacional de estas especies esté sujeto a las garantías de sostenibilidad de las poblaciones pescadas. Sin embargo, se está empezando a tener en cuenta a los tiburones. En las aguas del Atlántico se aplican algunas medidas de gestión, sobre todo para el marrajo sardinero y algunas especies especialmente vulnerables. Noruega ha propuesto que se considere la posibilidad de añadir los tiburones a la lista de especies gestionadas por la CICAA. Sin embargo, esto requerirá una voluntad común de todos los países miembros, lo que sigue siendo poco probable.
El atún rojo, ¿futuro símbolo de la buena gestión colectiva?
Como especie frágil, el atún rojo podría pasar de ser un símbolo de expoliación de recursos a uno de buena gestión colectiva y compartida basada en una ciencia sólida.
En los últimos años ha habido un buen impulso cuando la situación era crítica. Sin embargo, tendrá que ser confirmado tanto por la evolución de las cuotas para promover la recuperación de las poblaciones como por la capacidad de la CICAA de ampliar su acción a otras especies amenazadas.
Este modelo de gestión, bastante costoso, tiene el reto de consolidarse y aplicarse a otras especies de menor valor comercial. De hecho, las poblaciones de otros grandes depredadores también están disminuyendo.
Cómo responder a la
¿pide?
Además de la gestión de las poblaciones y la trazabilidad de las capturas, que son cuestiones importantes para ICCAT, hay que destacar otras iniciativas para el futuro del atún rojo.
La campaña de comunicación «Atún rojo, una historia para el futuro» y la etiqueta «Atún rojo, pesca artesanal» fueron lanzadas en 2012 y apoyadas por el Ministerio de Medio Ambiente francés.
Destacan el regreso del atún rojo al mercado como un pescado «sostenible» cuando se pesca de forma sostenible. Además, algunos proyectos científicos europeos y japoneses de «acuicultura sostenible» pretenden la «domesticación» del atún rojo: .
La reproducción y el crecimiento completo de esta especie en cautividad tendría la ventaja de evitar la extracción de atún rojo salvaje joven, como se ha hecho durante mucho tiempo para su engorde.
Los límites de la acuicultura
Sin embargo, la acuicultura del atún rojo, que se practica desde hace más de 30 años en Japón (Universidad de Kinki), no es rentable. Sus productos, poco apreciados por los consumidores japoneses, suelen destinarse a la exportación a Taiwán o Estados Unidos.
En cualquier caso, también está la cuestión de la cría de grandes depredadores que a su vez necesitan muchos peces para prosperar. Los salmones de piscifactoría ya necesitan 4 kg de «peces de alimentación» para crecer 1 kg ellos mismos. El atún rojo consume 11 kg de pescado para ganar 1 kg. Un modelo insostenible, cuyos límites podemos medir estableciendo un paralelismo con la cría de tigres o lobos para nuestro consumo: esto resume bien la forma en que se ha desarrollado el gusto del hombre por los animales marinos mientras pensaba que los recursos marinos eran infinitos.
Hoy en día, sería más interesante, desde el punto de vista económico y ecológico, dejar que la población salvaje se recupere y desarrollar una pesquería sostenible rigurosa.
Razones para la esperanza
En conclusión, las últimas observaciones sobre la evolución de la población de atún rojo parecen alentadoras. Sin embargo, habrá que esperar para confirmar la recuperación real de las existencias, que se espera en torno a 2022. En 2014 se llevará a cabo una nueva evaluación de la población de atún rojo del Mediterráneo. Ayudará a supervisar los progresos reales y a fundamentar las decisiones sobre las cuotas en los próximos años.
Mientras tanto, la prudencia sigue estando a la orden del día y hay que hacer muchos esfuerzos para mejorar la calidad y la fiabilidad de los datos, luchar contra la pesca ilegal, tener en cuenta las capturas accesorias y la trazabilidad y, sobre todo, apoyar el desarrollo de la pesca artesanal sostenible.
Técnicas de captura muy eficaces
El atún rojo se captura con red de arrastre, con anzuelo (línea de mano, curricán, palangre) o en «almadrabas» (trampas fijas cerca de la costa), pero principalmente lo capturan los atuneros cerqueros. En el Mediterráneo, más del 90% de las capturas de atún rojo se realizan con este método. Estos buques de pesca industrial, hipersofisticados, potentes y rápidos (con una velocidad de 16 nudos o 50 km/h), son capaces de detectar los bancos gracias a la electrónica de última generación (radar, sonar). Despliegan la «jábega», una enorme red que se lanza en arco y puede cubrir hasta 20 hectáreas en el mar, y capturan su cuota asignada en pocos días.
Este método plantea interrogantes porque se dirige a individuos de gran tamaño que acuden a reproducirse a zonas específicas (especialmente en torno a las Islas Baleares, Sicilia y Malta) durante períodos cortos (de mediados de mayo a mediados de julio). No sólo «vacía» literalmente el medio marino, sino que también perjudica a especies no objetivo y altamente amenazadas (mantas, tortugas, tiburones, cetáceos), sobre todo porque muchos atuneros utilizan dispositivos de concentración de peces (FAD), sistemas flotantes inteligentes que atraen a los peces e informan a distancia a los buques de la cantidad de peces presentes. En este caso, las capturas accesorias pueden representar el 5% de la pesquería.
Una pesca considerada injusta
En el Mediterráneo, muchos consideran que la pesca industrial con redes de cerco es injusta, ya que unos pocos grandes buques se reparten casi toda la cuota en detrimento de los pequeños, que ahora reclaman un mayor acceso al recurso.
El atún rojo también es objeto de una lapesca recreativa o deportiva (cuando está afiliada a una federación), que está muy bien regulada con la prohibición de vender productos pesqueros. Para el año 2020, la cuota asignada a la pesca recreativa en Francia es de 60 toneladas. En Mónaco, las condiciones de captura del atún rojo son fijadas por orden soberana.
Una escena de pesca tradicional inmortalizada por Rossellini
El nombre «atún» abarca 14 especies pertenecientes a 4 géneros diferentes(Auxis, Katsuwonus, Euthynnus, Thunnus), que se encuentran en casi todos los mares del mundo. Esta gran familia de peces tiene una gran importancia económica en una economía totalmente globalizada.
Crecimiento de las capturas mundiales
En 65 años, las capturas mundiales de atún han aumentado un 1 %, pasando de 500.000 a 5 millones de toneladas, y la demanda podría alcanzar casi 8 millones de toneladas en 2025. En cuanto al valor de las exportaciones de productos del mar, el atún ocupa elcuarto lugar, por detrás del camarón, el salmón y el pescado blanco.
Al final de la cadena, el valor de la venta se estima en 33.000 millones de dólares (es decir, el 24% de la industria mundial de productos del mar). El consumo medio per cápita de atún en 2007 (en todo el mundo) es de unos 0,45 kg al año. En la Unión Europea, en 2012 se consumieron más de 2 kg de atún en conserva per cápita.
El rincón de los expertos
De las 14 especies de atún, 7 son de gran importancia comercial.
3 especies* (atún rojo del Atlántico, atún rojo del Pacífico, atún rojo del Sur) representan sólo el 1% del volumen de capturas.
Lea más:
- Encuentre los datos del comercio de atún en el informe del IDDRI «Atún: pescado y pesca, mercados y sostenibilidad – 2017»
- El estado mundial de la pesca y la acuicultura
FAO – Edición 2020
Un pez que bate récords
El atún rojo del Atlántico es un pez marino de gran tamaño y el mayor de la familia de los «atunes». A los 30 años, puede alcanzar los 3 metros y superar los 600 kg. Su tamaño y peso en la madurez difieren según la zona geográfica. En el Mediterráneo, es adulto a los 4 años (es decir, 30 kg para una longitud de aproximadamente 120 cm) mientras que en el Atlántico occidental tarda 9 años (es decir, 150 kg para aproximadamente 190 cm).
¿"Pequeño" o "grande"?
En nuestra memoria colectiva han desaparecido el tamaño y el peso que pueden alcanzar ciertas especies animales (cocodrilos, tiburones, grandes peces como el bacalao o el fletán). En sólo una o dos generaciones, hemos cazado, pescado y eliminado a los grandes individuos. Lo que hoy consideramos especímenes «grandes», en realidad son sólo «pequeños» o «medianos». El atún rojo del Atlántico no es una excepción a esta regla. Un pez de 30 kg -que ya es un peso considerable- es sólo un «bebé» comparado con grandes individuos de varios cientos de kilos.
En la cuenca mediterránea, el atún rojo del Atlántico se explota desde el Neolítico, como atestiguan los grabados rupestres de las cuevas de la isla de Levanzo, cerca de Sicilia (foto de abajo, a la derecha: ¡es un atún y no un delfín!).
También está presente en esta moneda de bronce greco-hispano-cartaginesa (200-100 a.C.), procedente de Gades o Carthago Nova, ciudad griega de España. Coll. Instituto Oceanográfico.
Una estrella de la cocina japonesa
Hoy en día, el atún rojo se utiliza para hacer sashimi y sushi para los consumidores japoneses preocupados por la salud. Otros atunes (listado, atún blanco, rabil) se utilizan más en conservas y otros productos preparados y en conserva.
El atún rojo de primera calidad está alcanzando precios récord. En enero de 2019, en la subasta de Año Nuevo de Tokio, un atún rojo del Pacífico (Thunnus orientalis primo del atún rojo del Atlántico Thunnus thynnus) de 278 kg, capturado en el norte de Japón, se subastó por la increíble cifra de ¡2,7 millones de euros!
El atún del Mediterráneo se exporta...
En la cuenca mediterránea, más de 20 países explotan el atún rojo, lo que lo convierte en un recurso marino muy compartido que sólo puede gestionarse en un marco internacional. En las dos últimas décadas, el 60% de las capturas han sido realizadas por Francia, España, Italia y Japón, lo que otorga a estos países una responsabilidad especial.
La gran mayoría del atún rojo capturado en el Mediterráneo por la pesca industrial se destina a la acuicultura y a la actividad de engorde que abastece el mercado japonés.
Atún rojo del Atlántico
El atún rojo del Atlántico (Thunnus thynnus) vive en el Océano Atlántico, el Mediterráneo y el Mar Negro. Viaja en bancos y realiza extensas migraciones para alimentarse y reproducirse. Aunque suele vivir en aguas superficiales, puede sumergirse hasta 1000 m de profundidad. Este voraz y rápido depredador (es capaz de alcanzar velocidades de más de 100 km por hora) se alimenta de peces, calamares y crustáceos pelágicos (que viven en aguas abiertas). Un pez que bate récords, puede vivir 40 años o más, crecer hasta 3 m de longitud y pesar 600 kg. Situado en la cima de la cadena alimentaria marina, sus depredadores son la orca, el gran tiburón blanco y el hombre.
Lea más:
Encuentre el kit de prensa del IFREMER sobre el atún rojo
Distribución geográfica del atún rojo
Este mapa muestra la distribución espacial del atún rojo del Atlántico: en azul su área de distribución, en amarillo las zonas de desove conocidas. Las flechas negras indican las principales rutas migratorias (Figura adaptada de Fromentin y Powers – 2005) © Ifremer.
¿Lo sabías?
El atún rojo es uno de los raros peces capaces de la endotermia: adapta su temperatura corporal a su entorno y puede así evolucionar en aguas frías (donde se alimenta) o cálidas (donde se reproduce), es decir, ¡de 3 a 30°C!